Durante años el sector tecnológico ha sido típicamente masculino. Parece que en los últimos años esto ha ido cambiando, y aunque la mujer tiene más presencia, aún nos queda mucho camino por recorrer.

Son las mujeres las que utilizan más los dispositivos móviles, pasan más tiempo en redes sociales. Las mujeres lideran el uso de la tecnología, pero su presencia en el mercado es mínima. Hay pocas estudiantes, pocos perfiles y por ende, pocas directivas. La mayoría de las carreras técnicas siguen siendo típicamente masculinas.

La mujer en los mandos directivos

Este sector ha ido poco a poco equiparándose al resto, pero sigue existiendo el mismo problema: la brecha salarial y el acceso a los mandos directivos. Sin embargo, como hemos avanzado, éstas usan más la tecnología que los hombres.

Las medidas que ha tomado la Unión Europea para minimizar estas diferencias es la normativa comunitaria que exige que en el año 2020 un 40% de los consejeros sean del género femenino.

Esto ha provocado que aumente el número de mujeres en todos los sectores. Otras empresas han querido ir más lejos. Google, por ejemplo, concede la Beca Anita Borg. Anita Borg fue una científica e informática que se marcó como meta que en el 2020 el 50% de los titulados informáticos fueran mujeres.

Esta beca, por tanto, está destinada a estudiantes de Europa, África y Oriente Medio. Las solicitantes son mujeres estudiantes de grado o postgrado en algún área tecnológica. Esta beca tiene como finalidad animar a las mujeres a que participen más en los campos científicos y tecnológicos. Está claro que queda mucho por hacer, pero poco a poco se incorporarán, para quedarse, en el sector IT.

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